Cómo elegir tarritos para bebé

Los tarritos para bebé son una opción nutritiva y saludable para darle ocasionalmente a tu bebé,
perfecta para viajes o comidas fuera de casa.

Una buena alternativa

Aunque es recomendable que la base de la dieta del bebé se componga de purés caseros, la comida preparada es una alternativa nutritiva, asequible y cómoda que pasa por múltiples controles y no contiene contaminantes que puedan dañar al bebé. Para comidas fuera de casa o viajes, los tarritos pueden ser una buena solución.

Según la OCU, los tarritos infantiles son muy seguros porque:

• No contienen contaminantes como nitratos, pesticidas o micotoxinas.

• Su higiene es óptima.

• Están esterilizados, por lo que no necesitan conservantes ni refrigeración mientras estén cerrados.

En qué fijarse

Edad recomendada

El bebé puede alimentarse con comida complementaria a la leche a partir de los 6 meses. Fíjate en la edad recomendada que aparece en el envase del tarrito antes de consumirlo para asegurarte que el preparado no incluya ningún ingrediente que el bebé todavía no puede tomar. Además, la OCU recomienda no abusar de los tarritos a diario en bebés menores de 10 meses, ya que estos tienen un contenido en proteínas algo elevado para su edad.

Ingredientes

Se recomienda que los ingredientes de los tarritos se parezcan lo máximo posible a los que se utilizan en un puré casero, a base de fuentes primarias como verdura, fruta, legumbre, carne, pollo o pescado. También es importante fijarse en los ingredientes para evitar posibles intolerancias.

Para escoger un buen tarrito te en cuenta lo siguiente:

• Evitar el azúcar y la sal añadida

• Mejor cuanto más alto sea el porcentaje de ingredientes primarios (verdura, fruta, legumbres o carne). A partir de un 60% es un buen porcentaje.

• El mejor aceite es el Aceite de Oliva Virgen Extra. Otros aceites vegetales como los de como el de girasol, colza o palma son de peor calidad.

• Evitar espesantes y otro tipo de agregados como almidones, harinas o zumos concentrados.